Hoy les presentamos un nuevo estudio realizado en la Comunidad de Madrid entre los años 2001 y 2009, el cual relaciona el ruido con la muerte por diabetes.
La investigación realizada por el Instituto de Salud Carlos III, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Universidad Autónoma de Madrid viene a corroborar una vez mas el impacto negativo del ruido en la salud.
Esta vez centrándose en el ruido del tráfico, han llegado a la conclusión de que no sólo crea un riesgo elevado de irritabilidad y dolores de cabeza sino que también como se venía argumentando promueve las enfermedades cardiovasculares, respiratorias y también es un riesgo para las personas diabéticas.
Una vez realizado el estudio los datos apuntan a que durante los años de duración del mismo siempre que se sufría un pico de ruido elevado se incrementaban considerablemente las muertes por diabetes.
Esta conclusión ha sido apoyada por la siguiente teoría; al dormir el eje hipotalámico segrega sustancias que traspasa directamente a la sangre cuando escucha ruidos, entre estas sustancias está el cortisol, elemento que en dosis elevadas puede generar diabetes, según argumenta el doctor Julio Díaz del Instituto de Salud Carlos III, pero no sólo es causa de la enfermedad sino también puede serlo de la muerte provocada por la misma.
El estudio demuestra que después de un periodo de ruidos elevados, como se plasma más arriba, se genera un incremento de muertes por esta enfermad, pero lo realmente sorprendente es en el corto plazo en el que se advierte el aumento de fallecimientos, siendo éste un periodo de dos a tres días después del despunte de los picos de ruido, este efecto ha tenido una repercusión mayoritaria sobre las personas mayores de 65 años.
Nos encontramos ante un gran problema de salud pública, sin embargo, según Julio Díaz, adoptando algunas medidas correctoras como el cambio de los asfaltos se podría reducir considerablemente este impacto, el problema es que la conciencia de la población respecto a la influencia negativa del ruido en nuestro organismo es aún muy deficiente.